AVN está avanzando con el plan de vacunación con efecto anticonceptivo a carpinchos machos y hembras que fuera anunciado en febrero pasado. Ya fueron vacunados ejemplares de siete de las familias o manadas de animales que viven en Nordelta.
La iniciativa fue aprobada por la Dirección de Flora y Fauna de la Provincia de Buenos Aires, quien acompaña el proyecto impulsado por la Asociación Vecinal -a partir de estudios y propuestas de investigadores de Conicet- para ejercer mayor control sobre la cantidad de animales en Nordelta.
La vacunación se ha realizado ya en carpinchos que habitan en los lagos de los barrios Los Castores, La Alameda, Barrancas del Lago, Los Sauces, Virazón, Los Lagos y Tipas. Las intervenciones fueron realizadas por un equipo de especialistas en manejo de fauna silvestre y pudieron aplicarse las vacunas sin riesgo para los animales.
El procedimiento se realiza en forma ambulatoria: se reúne a los carpinchos del grupo en un espacio acotado por mallas de tela o rejas dentro del área donde habitan, en caso de ser necesario se seda a los machos y hembras en edad reproductiva para poder aplicar la vacuna y una vez vacunados todos son liberados en el mismo lugar.
Crecimiento de la población
En el último año, hubo un importante crecimiento de la población de carpinchos dentro de la Ciudad. Eso afecta la convivencia entre vecinos y animales, también entre estos, porque aumenta la competencia por refugio y comida, mientras que el mayor hacinamiento podría provocar enfermedades o deficiencias nutricionales.
La técnica de vacunación está probada en diversas especies silvestres (incluidos carpinchos) y de cría comercial. Está autorizada para su uso tanto en la Argentina como en Estados Unidos, el Reino Unido y otros países.
El anticonceptivo se aplica mediante una vacuna, de la que deben suministrarse dos dosis. En esta etapa se está aplicando la primera de esas dos dosis.
Este proyecto reafirma el compromiso de la Asociación Vecinal con la preservación y el manejo responsable de la fauna, promoviendo una convivencia armoniosa y sostenible entre los carpinchos y la comunidad, con particular foco en el control del crecimiento poblacional y gran cuidado de los ejemplares.